El Valencia Basket y el CSKA de Moscú , vigentes campeones de Eurocup y Euroliga se enfrentaban en la primera jornada de la máxima competición de clubes de baloncesto a modo de ‘Supercopa’ para mostrar como estaban los dos equipos en este inicio de temporada.

El partido empezó con CSKA reventando el partido, con los ex baskonistas Mike James y Darrun Hilliard junto con Johannes Voigtmann destrozando la defensa del conjunto taronja que solo era capaz de anotar mediante tiros libres ante Kyle Hines y Nikita Kurbanov. Al ecuador del partido el 5-13.
Mike Tobey era el único capaz de sostener en ataque al equipo dirigido por Jaume Ponsarnau en ímpetu y ganas de cara el aro, fue capaz de impulsar el ataque y jugadores como Louis Labeyrie, Joan Sastre o Bojan Dubljevic se sumaron a la contienda. A pesar de ello, poco pudieron hacer al respecto ante la perfecta conexión ataque – defensa del conjunto moscovita, con Andrey Voronsevitch , que dejaban el resultado en 17-24 al final del primer cuarto.
El segundo cuarto empezó con Valencia Basket despertó tratando de solucionar el diferencial que había en el marcador. Con Vanja Marinkovic o Alberto Abalde como actores principales, Valencia Basket cambió la dinámica de partido y fue el CSKA quién sobrevivió a base de canastas intermitentes, dejando un marcador de 29-32 a cinco minutos del descanso.
El cuadro valenciano seguía presionando desde la defensa y aprovechando los huecos que dejaba la defensa del equipo dirigido por Dimos Itoudis para poder mantenerse en ritmo de partido, pero el conjunto ruso a base de triples lograba seguir reinando en el partido por 38-50 al descanso.
En el tercer cuarto, CSKA se puso en modo arrollador, con Hillard como anotador principal del partido, para marcar territorio como actual campeón del torneo y sacaba músculo en ambos lados de la pista, dejando un marcador de 47-64 al ecuador del cuarto, con el equipo siendo el amo y señor del partido.
Brock Motum y Vanja Marinkovic eran los únicos capaces de aguantarle el ritmo de partido a un CSKA que quería dar un golpe definitivo sobre la mesa a pesar de tener el partido controlado. Antes de los diez minutos finales de partido, el marcador era de 54-76.
En el último cuarto, el CSKA se dedicó a anotar en su ‘carnaval anotador’, anotando de todos los colores y formas con Will Clyburn o Joel Bolomboy al mando de la fiesta, mientras había aficionados marchándose del pabellón, ya que el marcador 60-86 les había aguado la fiesta.
Finalmente, el marcador fue de 71-96 para un CSKA que mostró galones de campeón de la máxima competición europea en su andadura como vigente poseedor del torneo y Valencia Basket deberá seguir mejorando sus mecanismos en ambos lados de la pista para poder competir a lo largo de la competición.