La contratación de Nate McMillan como nuevo entrenador ha supuesto toda una revolución para el conjunto del estado de Georgia, que no acababa de tener buenas sensaciones en ningún momento de la temporada. Jimmy Butler está siendo el líder de unos Heat que ya empiezan a recordar a ese equipo de la burbuja de Orlando que alcanzó las finales, y Nikola Jokic sigue firmando actuaciones descomunales a nivel de MVP, gracias a las que Denver ha ganado 8 de sus últimos 10 encuentros.
Tras perder las finales de la NBA frente a los Lakers el pasado mes de octubre en la burbuja de Orlando, los Miami Heat (22-19) habían contado con muchos problemas en los compases iniciales de la temporada. Numerosas bajas por lesiones y protocolos anti-COVID, además de una falta de identidad en el juego, era lo habitual semana tras semana. Una de las claves para que el equipo haya solucionado sus problemas ha sido, sin duda, la vuelta de Jimmy Butler, que tuvo que perderse bastantes partidos (sobre todo en el mes de enero). Los del sur de Florida han ganado 10 de los últimos 12 encuentros, y actualmente se encuentran clasificados en la cuarta plaza de la Conferencia Este. Además, en parte gracias a Butler, ostentan la tercera mejor defensa de la competición (por detrás de Lakers y Philadelphia).
Otro de los equipos del Este que ha firmado una gran semana son los Atlanta Hawks (20-20). Al igual que los Heat, ha sido un equipo que desde que diera comienzo la temporada, ha sufrido una gran cantidad de bajas. El equipo no funcionaba, y hace dos semanas la directiva tomó la decisión de destituir a Lloyd Pierce, para firmar al ex entrenador de los Indiana Pacers, Nate McMillan. Desde la llegada del técnico de Carolina del Norte, los Hawks han ganado sus 6 últimos partidos de forma consecutiva. Bajo el liderazgo de Trae Young (26 puntos por partido) y un Danilo Gallinari que está dando un gran rendimiento últimamente (19 puntos de media en las 6 victorias), están ahora mismo en la sexta posición del Este, a únicamente un partido y medio de Miami (cuartos). Además, la plantilla comienza a recuperar efectivos como Bogdan Bogdanovic (volvió el 3 de marzo), que se adapta poco a poco a la dinámica del nuevo entrenador, tras haber estado casi 2 meses sin jugar por una grave lesión en su rodilla derecha.
Hoy hemos conocido dos nuevos movimientos en el mercado de la NBA. Un mercado de traspasos que se cerrará de forma definitiva en una semana (25 de marzo). Tras ser apartado del equipo por sus comentarios anti-semitas en su canal de Twitch, Meyers Leonard jugará finalmente en los Thunder, a cambio de Trevor Ariza (todavía no ha debutado esta temporada) y una futura segunda ronda del draft. Por otro lado, PJ Tucker ha sido adquirido por los Milwaukee Bucks en un traspaso a tres bandas, por el que DJ Agustin, DJ Wilson, una primera ronda del draft de 2023 y un pick de primera ronda del draft de 2021 procedente de Milwaukee (lo perderían en el caso de que estuviera entre las 9 primeras elecciones), viajan a Houston. Por último, los Bucks también reciben a Rodions Kurucs y una primera ronda del draft de 2022, y Torrey Craig es traspasado a los Phoenix Suns.
Nikola Jokic sigue opositando al MVP de la temporada. El serbio ha promediado casi un triple-doble (30 puntos, 12 rebotes y 9.2 asistencias), alcanzando casi el 60% de acierto en tiros de campo esta semana, con los Nuggets (24-16 y quintos del Oeste) obteniendo la victoria en 6 de los últimos 7 encuentros que han disputado. Esta semana hemos tenido actuaciones excepcionales, como la de Damian Lillard el martes frente a los Pelicans. El base californiano firmó 50 puntos con un 13 de 20 en tiros de campo para ganar un encuentro que se puso cuesta arriba para los Blazers, que perdían por 17 puntos. Es el tercer partido en la carrera de Lillard con 50 puntos y más de 10 asistencias.
Tanto los Blazers como los Pacers han conocido buenas noticias esta semana, ya que han podido contar de nuevo con CJ McCollum (lesión) y Caris LeVert, tras ser intervenido por un quiste detectado en su riñón. Una operación que se desarrolló sin ningún tipo de complicación. Joel Embiid solo se perderá entre dos o tres semanas tras la caída que sufrió en la rodilla el pasado viernes. Todos, hasta el propio jugador se temían lo peor, como una rotura del menisco o ligamentos, pero después de las pruebas, se ha confirmado finalmente una simple contusión. Otro de los lesionados es Anthony Davis, que lleva sin jugar desde el 15 de febrero por una lesión en el tendón de Aquiles. Según las últimas noticias, el interior se perdería al menos tres semanas más, e incluso podría alargarse todavía más el tiempo de baja. La ausencia de Davis no ha afectado notablemente a los angelinos esta semana, que han ganado 3 de sus últimos 4 partidos, con un Montrezl Harrell (24.7 puntos de media en estos encuentros) que ha suplido a la perfección la baja del ala-pívot nacido en Chicago.