Tras la derrota frente a España en 2019 y su derrota en los cuartos de final en Tokio, como últimos viajes en grandes competiciones de selecciones, Luis Scola se despide y para ello, hay que resumir lo que supone su figura para el baloncesto en general y para la Argentina, cogiendo como referencia para ello la canción «Alguien le dijo al Tango» de Astor Piazzola a partir de los versos del gran poeta José Luis Borges (cambiando la palabra tango por baloncesto en diversos puntos del artículo, incluido en el titular, como principal adaptación).

Edición a partir de fotos FIBA.

Argentina siempre ha sido un país con pasión por el deporte y la música, con su tango como elemento de expresión artística de alto nivel, toca combinar la disciplina deportiva de moda (el basket) con su música más representativa para darles un homenaje con la canción «Alguien le dijo al Tango»:

Por el «Tango (Baloncesto) que he visto bailar, contra un ocaso amarillo», el de la época dorada ha sido suplido por un juego más aguerrido y efectivo, a pesar de que esos herederos de oro tengan talento de sobra para mantener el legado. Pero se caracterizan «por quienes eran capaces de otro baile, el del cuchillo» en el sentido de ir «a cuchillo», sin piedad, ante teóricas favoritas que debían ganarles por calidad pero no contaban con el «baloncesto de aquel(llos) maldonado(s)(unos cualquiera, o esa imagen podían tener de ellos los que se sorprendieron de su éxito en Atenas), con menos agua que barro (con los recursos que tenían)», o dicho de otras forma, por aquellos ‘no elegidos’ que sabían mostrar su dureza para compensar las carencias que pudieran tener en ataque fueron «baloncesto silbado al pasar desde el pescante del carro», o lo que es lo mismo, no siempre el baloncesto argentino no siempre fue visto tan bien visto.

«Despreocupados y zafados, siempre miraban de frente», porque no había partido en el que no salieran a tratar de plantar cara, sin tener en cuenta lo que dijeran las predicciones, aunque ellos no fueran los favorito (hecho que ocurrió habitualmente) y siempre plantaron cara ante las adversidades deportivas.
Tango que fuiste la dicha de ser hombre y ser valiente, siendo este caso concreto por ser una persona que guiaba con el ejemplo y seguir compitiendo aunque el rival fuera mejor (como la famosa ‘charla’ con Kobe Bryant), mientras lograba que su baloncesto gustase mientras se gustaba (‘Tango’que fuiste feliz Como yo también lo he sido) mientras trataba de aportar a la selección nacional en las buenas y en las malas («Según me cuenta el recuerdo; El recuerdo fue el olvido»).

«Desde ese ayer, ¡cuántas cosas a los dos nos han pasado!», como muestra del camino recorrido por el ala-pívot durante sus 22 años con la selección en «Las partidas y el pesar, de amar y no ser amado», o lo que es lo mismo, en las buenas y en las malas, estando presente para aportar su calidad y experiencia al grupo-
«Yo habré muerto y seguirás, orillando nuestra vida», como muestra del legado de la generación que se marcha con la retirada de ‘lucho’ pero que han plantado la semilla para las siguientes generaciones con un legado imborrable,»Buenos Aires» (Como reflejo del amor que puede sentir el país en general por el) no te olvida, Tango que fuiste y serás», para mostrar que, incluso al final de sus días como jugador, Luis Scola seguirá siendo recordado como una leyenda y referencia del país en el ámbito del deporte igual que el tango es una de las máximas expresiones culturales y artísticas del país.