Duelo entre el colista y el primero del grupo E-A de la EBA en el primer partido de la segunda fase que jugaba el conjunto edetano como local, tratando de posicionarse lo mejor posible mientras el conjunto castellonense seguía luchando por rascar minutos con una plantilla reducida

Captura de pantalla del resultado final

El partido empezó con muchos errores en ambos lados de la pista, pero un triple de Carlos Edo y Nacho Maté parecía iniciar una mejora en el ritmo anotador que llegó a cuenta gotas, especialmente para el conjunto local, con Ximo Ródenas como ejecutor principal y con Pau García como distribuidor principal desde la zona, logrando así distanciar al conjunto lliriano hasta el 10-3 tras los primeros cinco minutos de juego.

Isaiah Willis sumó un 2+1 para tratar de recortar distancias, pero un triple de Ródenas y un par de acciones de Nacho Maté lograron poner más tierra de por medio durante varios minutos pero los esfuerzos de Edo y Alfonso Ribera por tratar de revertir la situación junto con Santiago Vázquez, como uno de los pocos jugadores que salía desde el banquillo debido a la corta rotación del equipo castellonense, lograron igualar el marcador, con una veintena de puntos por equipo, pero un tiro libre de Godwin Osareren dejó un marcador de 21-20 al final del primer cuarto.

El segundo cuarto empezó con un triple de Víctor Pérez y otro de Rubén Ramos, seguidos de una buena defensa junto a una bandeja al contraataque de Osarenren que permitieron mantener distancias en favor del conjunto del conjunto aurinegro, pese a los esfuerzos de los siete jugadores del equipo gelat, que aguantaban bien a los dos lados de la pista las exigencia del encuentro, dejando ese intenso cruce de canastas un marcador de 33-29 a cinco minutos para terminar la primera parte.

Osarenren y Víctor Faubel eran los jugadores más destacados del conjunto del Camp de Túria, mientras que Edo seguía siendo el alma y el líder en el conjunto de la comarca del Alcalatén, con Juan Manuel Robles o Willis sumando como segundos espadas para mantener las opciones de su equipo, dejando un resultado de 50-41 al descanso.

El tercer cuarto empezó con un triple de Carlos Faubel y Chema Torres sumando desde el triple, como también terminó haciendo Ximo Ródenas, para poner un parcial de 11-0 y provocar un tiempo muerto de Antonio Cano, que no sirvió para impedir que Pau García se sumase tras ello al recital anotador con un palmeo además de una acción de 2+1 tiro libre, como también lo hizo Godwin Osarenren en una doble ocasión, llegando a poner otro parcial, en este caso de 9-0 tras la pequeña pausa, rota por un buen movimiento de Alfonso Ribera que trató de frenar la sangría anotadora, que no impidió al equipo dirigido por Víctor Rubio cogiera ritmo y se distanciase hasta el 70-43 pasados cinco minutos tras la reanudación.

García se mantuvo como referencia interior del cuadro local, especialmente tras el golpe recibido por Osareren en el labio superior, igual que lo hacía Santiago Vázquez por parte de los visitantes, tratando junto a Juan Manuel Robles y David Romero de mantener alguna opción de volver al partido, pero pese a los esfuerzos del conjunto alcorino, el marcado reflejaba un marcador de 79-53 tras la canasta de Kelvin Meraño con diez minutos de juego por disputarse.

En el último cuarto, Llíria continuo su ritmo y siguió con su estilo combinativo para fluir además de tener a Meraño como jugador más completo en ambos lados de la pista, logrando distanciarse un poco más en el marcador dejando un resultado de 92-60 con cinco minutos de juego por disputarse.

Finalmente, se hizo realidad lo que los cánticos de “queremos el cien” por parte los jóvenes aficionados en el Municipal de L’Eliana o “queremos un triple” y “triple, triple, triple” cuando lo veían a tres puntos de diferencia, dejando un marcador de 101-73 para que Llíria siguiera sumando como local en este inicio de temporada lejos del Pla de L’Arc, siendo esta vez contra el colista que aguantó como pudo con una rotación muy corta y mucho cansancio acumulado.