La entrenadora, que ha logrado dos cetros europeos con la selección nacional, se mantendrá un bienio más al frente del combinado femenino, al que desde 2015 ha llevado a las cotas más altas a nivel de selecciones femeninas desde que participan como ‘República de Serbia’.

Marina Maljkovic seguirá siendo la seleccionadora femenina senior de Serbia durante 2 años más. Tras los éxitos obtenidos desde 2015 con jugadoras como Milica Dabovic (pese a sus desencuentros en los últimos años) o Daniel Page que se fueron retirando por el camino y con la despedida de jugadoras como Sonia (Petrovic) Vasic y Jelena (Milovanovic) Brooks tras los Juegos Olímpicos de Tokyo; la joven pero experimentada entrenadora iniciará la transición del conjunto serbio con experimentadas jugadoras como Tina (Jovanovic) Krajisnik, Saša Čađo, Nevena Jovanovic, Ana Dabovic, Dragana Stankovic o una pieza clave como Aleksandra Crvendakic (cumplirá 25 en 2022) que se mantienen como núcleo duro junto a jugadoras como Maša Jankovic y Ángela Dugalic, que ya estuvieron en la cita de La Fonteta y/o las Olimpiadas, además de Ivana Katanic, que se sumó en las últimas ventanas.
«Lo que hay que recalcar es que la devoción y lealtad de Marina a esta casa, a la Asociación de Baloncesto, así como a la selección, es que pasa tiempo por cuarentena cada vez que viene. Desde hace medio año o mientras está con la selección, ciertamente ha pasado tres o cuatro meses en cuarentena, lo que demuestra su compromiso con KSS (siglas de la federación) y las chicas que entrena. Repito que estoy muy feliz y satisfecho de que Marina esté con nosotros por lo menos otros dos años«, dijo el presidente de la federación y ex jugador profesional, Pedrag Danilović, tras hacer oficial el acuerdo de renovación con la líder en los banquillos de la ‘generación dorada’ de las devojke.
Marina, que emprendió su carrera como entrenadora con 18 años cuando abandonó Barcelona, donde vivía con su padre Bozidar (y pese a la negativa paterna para que siguiera sus pasos), poniendo rumbo a Belgrado con el objetivo de iniciar una carrera que, tras su paso por clubes como el Galatasaray turco, ha tenido sus puntos más álgidos como seleccionadora del combinado de su país natal.