La segunda jornada de octavos empezaba con el que, se suponía, era el partido menos entretenido de la jornada, con dos equipos que buscaban estar entre los 8 primeros en dos contextos totalmente diferentes aunque llegando a esta fase con caminos parecidos en el torneo.

El partido empezó denso y sin ideas, con Mateusz Ponitka liderando y con A.J. Slaugther antes de que un mate de Alex Len (que también sumó un triple) y Svi Mykhailiuk dieran un giro al partido favorable al conjunto ucraniano. Alexander Balcherowski y Volydimyr Herun sumaron una canasta en cada lado para que el marcador se fuera cerca del 10-12 pasados cinco minutos de juego y al que se llegó tras una canasta de Ponitka.

Balcherowski, Bogdan Bliznyuk, Issuf Sanon antes de que Slaughter diera emoción al encuentro con cuatro puntos seguidos, con solo un mate de Ivan Tkachenko y un triple de Vyacheslav Bobrov como respuestas a las siguientes canastas del base ‘polaquizado’ y de Michael Michalak. Una canasta sobre la bocina de Artem Pustovyi dejaba un marcador de 21-24 para el equipo dirigido por Igor Milicic.

El segundo cuarto empezó con un par de jugadas creativas y de inteligencia, especialmente con el robo de Illya Sidorov. Jakub Schenk, Sanon y Len subieron el ritmo antes del tiempo muerto del equipo polaco, tras el que no cambió la tendencia con cuatro puntos de Balcherowski además del acierto de Bobrov. Michalak y Slaugther terminaron forzando un tiempo muerto de Ainars Bagatskis, que veía como su equipo no era capaz de ponerse por delante, dejando un marcador 34-35 a cinco minutos del descanso.

Michal Sokolowski y Bobrov amenizaron el ritmo del juego para, esta vez sí, poner a la selección ucraniana por delante, con Bliznyuk sumándose de nuevo para mantener el nivel de su selección, que aguantó bien el golpe del conjunto polaco, dejando un marcador de 45-42 a su favor al finalizar la primera parte.

Tras la reanudación fueron Alexander Balcerowski, Svi Mikhailiuk y Alex Len los que comenzaron sumando a base de tiros libres hasta que Len (con un apurado mate frente a un defensor que terminó entrando) y Mikhailiuk (con otro menos ajustado) trataron de ampliar la diferencia pero Mateusz Ponitka y Balcherowski trataron de frenarlos por todos lo medios. Vyacheslav Bobrov puso un marcador de 57-54 tras cinco minutos del tercer cuarto.

Artem Pustovyi trató de mantener el marcador favorable para su selección pero Alexander Dziewa, Ponitka y Michal Sokolowski igualaron (a 59) el partido antes de un tiempo muerto ucraniano, tras el cuál Dziewa fue capaz de poner a su equipo por delante, pero el aspecto decisivo fueron los tiros libre, más allá de alguna canasta cerca del aro u tiros de media distancia, ya que ambos equipos se aferraron a sacar provecho de su envergadura (especialmente Pustovyi) o de su habilidad (como A.J. Slaugther) para sumar la mayor cantidad de números posibles, dejando ello un marcador de 67-69 a diez minutos de cerrar el partido.

El último cuarto empezó con Issuf Sanon poniendo a su equipo por delante pero Slaugther y Lukasz Kolenda evitaron que el triple posterior de Ivan Tkachenko sirviese para sumar más diferencia, no así el segundo triple que anotó para volver a poner a los suyos por delante. Los cambios de ventaja fueron la tendencia clave para ver un mejor juego por parte del equipo ucraniano, mientras Polonia se mantenía en el partido a base de tiros libres y defensa, más allá de algún lanzamiento puntual (desde la media / larga distancia) de Ponitka o Sokolowski, hecho que fue suficiente para liderar el partido con un marcador de 78-84 a cinco minutos del descanso.

Finalmente, pese a que Ucrania lo intentó de todas las maneras posibles, fue Polonia quién aprovechó el tirón y se llevó el triunfo por un ajustado 86-94, cambiando su estilo y aprovechando la versatilidad de sus hombres clave para rematar un partido que les sirve para volver a los cuartos de final en un gran torneo.