El partido segundo del torneo, vista la tensión del primero, mostraba como podía ser el nivel de la primera fase del torneo para marcar el ritmo de lo que puede ser el resto de la competición en el Palau Olimpic, con un partido entre catalanes y andaluces que siempre ha sido, históricamente, favorable para el equipo que también era cabeza de serie con 7 victorias.

Nicolás Laprovittola lanzando a canasta sin éxito por encima de David Kravish. Emilio Cobos / acb Photo

El partido comenzó con Kendrick Perry, junto a Darío Brizuela, comandando los intentos del equipo malagueño por llevarse el prinmer parcial, con Nikola Mirotic como principal oposición para evitar un nuevo asalto de un equipo no cabeza de serie por tratar de dar la sorpresa, con Rokas Jokubaitis o Dylan Osetkowski sumando varios 2+1 para subir el ritmo del juego, siendo el lituano quién metió un triple At The Buzzer para terminar el periodo inicial con un marcador de 21-20.

El segundo cuarto empezó con jugadores como James Nnaji o Mike Tobey dominando el aro, junto con un triple de Álex Abrines, para sumar un parcial de 7-0 que Perry terminó rompiendo con un 2+1, dando muestras de la intensidad del encuentro donde Nnaji siguió dando muestras de su poderío en la zona o como Cory Higgins intentaba sumar cerca del aro, con el equipo andaluz tratando de permitir canastas sin defensa, pero ni en ataque ni ante una zona mixta en el otro aro, fue capaz de mantener el ritmo. Tyson Carter, David Kravish y Perry siguieron tratando de rebajar el buen hacer ‘culé’ en la pintura. Tyler Kalinowski junto a Tomas Satoranski cerraron la primera parte con un marcador de 41-34.

Tras el descanso, el duelo mantuvo cierto igualdad en ritmo de anotación y de juego, con Nikola Mirotic y Darío Brizuela dando los primeros golpes, mientras jugadores como Nikola Kalinic o Cory Higgins trataron de ampliar la distancia en favor del conjunto dirigido por Sarunas Jasikevicius, pero el gran papel de David Kravish, que sirvió para reducir distancias. Una canasta de Kendrick Perry junto con una buena defensa dejaron un marcador de 55-50 al final del tercer cuarto.

El último cuarto comenzó con Higgins y Perry manteniendo el entretenimiento para el público de Badalona, con Álex Abrines y Rokas Jokibaitis tratando de golpear en todas las ocasiones posibles, logrando una diferencia que rondaba la decena de diferencia. Tras dos tiros libres anotandos por Will Thomas y Nicolás Laprovittola, el marcador era de 67-57 a cinco minutos para que concluyera el tiempo reglamentario.

Ante de los esfuerzos de Alberto Díaz, Brizuela, Tyler Kalinowski y Perry, fueron Abrines y Laprovittola los que más apretaron para tratar de mantener una distancia que terminó desapareciendo, con Dylan Osetkowski o Jan Vesely apretando el marcador, para dejar un marcador igualado a 76 al final del cuarto periodo.

La prórroga comenzó con el Unicaja sufriendo a nivel táctico (con la zona) y físico (con los árbitros siendo incapaces de parar el juego cuando había jugadores en el suelo, siendo Brizuela el principal ejecutor del equipo de la Costa del Sol, aguantando todo los golpes y logrando encontrar los huecos para irse hasta los 27 puntos. Will Thomas y Perry también se sumó al causa cajista para poder dar el golpe, pese a los irregulares esfuerzos de un Laprovittola que peleó hasta el final, fallando un tiro a 0,8 del final pero Unicaja venció por 87-89 para romper una racha histórica y avanzar a las semifinales.