Tras la victoria con Bilbao, el objetivo del conjunto valenciano buscaba seguir peleando por el octavo puesto frente a un equipo que buscaba el mismo objetivo, tratando de devolver a Galicia la post-temporada, con el objetivo de pelearlo en la Capital de Turia en un duelo prácticamente directo por ello.

El partido comenzó con Cassius Robertson y Edgar Vicedo golpeando por parte del equipo que lucía camiseta con mangas, mientras Bojan Dubljevic, Víctor Claver y Jared Harper golpeando para mantener el buen ritmo de juego. Rubén Guerrero se sumó al buen hacer del equipo de Santiago pero Hermannsson y Víctor Claver provocaron un tiempo muerto de Moncho Fernández para cambiar la dinámica. Leo Westermann y Chris Jones se sumaron al buen hacer anotador mientras las defensas seguían funcionando eficientemente, sobretodo a la hora de robar balones tras exceso de movimiento del balón. Con Phil y Thomas Scrubb apareciendo en escena, Jonah Radebaugh intentó un triple desde detrás del medio campo que anotó fuera de tiempo, dejando un marcador de 23-24 al final del primer cuarto.

El segundo cuarto empezó con Radebaugh resarciéndose con un 2+1 y cambiando la tendencia en favor del equipo valenciano, con Chris Jones a los mandos y con Robertson, Alex Suárez o Álvaro Muñoz tratando de compensar todos los arriesgados rebotes ofensivos del equipo taronja, con Dubljevic o Hermannsson trabajando también para mantener la dinámica, con el islandés dejando un marcador de 46-45 tras un rectificado a tablero.

Tras la reanudación, el ritmo de juego recordó a épocas pasadas por la densidad del juego y los fallos constantes con los triples. Bojan Dubljevic y Víctor Claver mantuvieron la dinámica, con apariciones clave de James Webb III para ir cogiendo una ventaja solvente pese que Thomas Scrubb intentó mantener la distancia, quedando un marcador de 66-60 al final del tercer cuarto.

El último cuarto empezó con el conjunto santiagués apretando para igualar el partido pero el equipo dirigido por Álex Mumbrú supo mantener el envite. Un par de acciones finales con Chris Jones asistiendo (antes de lesionarse) por la espalda para un triple de Shannon Evans y un mate de Jaime Pradilla que dejaron un marcador de 75-67 a cinco minutos para terminar el partido.

Finalmente, Valencia Basket resistió y ganó por 85-78 al Obradoiro en un partido denso para ser una noche de sábado, donde lo único que importó fue la victoria en un partido descafeinado y con mal juego pese al resultado.