La temporada masculina comenzaba en La Fonteta con un duelo que parecía vital ya de inicio para evitar que los fantasmas del pasado florecieran desde los primeros compases de la competición, con todo lo que supondría volver a escuchar música de viento en la tarde valenciana.

El partido comenzó con el conjunto catalán dominando el encuentro gracias a su buen hacer en la pintura, logrando encontrar espacios tras bloqueo y por línea de fondo gracias a su buen trabajo colectivo, mientras que la nueva versión taronja buscaba sumar a base de triples, con Kassius Robertson, Josep Puerto y Chris Jones como ejecutores principales. Mindaugas Susinskas y Jaume Sorolla junto a Ike Iroegbu lograron enontrar los espacios en la defensa, mientras Guillem Ferrando y Brandon Davies aguantaron, permitiendo que un triple At The Buzzer de Jared Harper que dejaba un marcador de para poner un marcador de para dejar un marcador de 21-27 al final del primer cuarto.

En el segundo cuarto fueron Boubacar Touré y Chris Jones lideraron a los locales mientras Gyrogy Golomán lideró al equipo visitante para seguir controlando el partido, llegando a vencer por 10 puntos (23-33) antes de que Puerto, Jones y Davies pusiesen al conjunto dirigido por Alex Mumbrú con ventaja en el marcador, pero Iroegbu puso un marcador de 41-42 al descanso.

Tras la reanudación, Ike Iroegbu y Kassius Robertson buscaron desatascaron el juego a base de triples, con el equipo entrenado por Salva Camps seguía dominando el encuentro en un partido que tuvo tramos muy densos de juego, con Chris Jones logrando mantener la igualdad en el partido junto a Robertson y Harper, aún así la ventaja seguía siendo para el 58-59 al final del tercer cuarto.

Al inicio del último cuarto, un mate tras aro pasado y a dos manos de de Víctor Claver junto a un triple de Yves Pons desde la esquina dieron un vuelco al partido con jugadores como Jaime Pradilla y Brandon Davies, que lograron un parcial de 7-0 para cambiar la dinámica. Un 3+1 de Gyorgy Golomán seguido de diversas canastas anotadas por Pradilla, Harper, Yves Pons y Juani Marcos mantuvieron esa frescura, llegando a un marcador de 73-72 a cinco minutos para cerrar el partido.

Finalmente, sonó la música en La Fonteta, con un 85-89 tras unos últimos minutos de infarto con canastas fáciles en el aro local, puntos imposibles en el visitantes, pero un partido así no era lo esperado por el público valenciano, que veía como las imprecisiones arbitrales (Yves Pons saltando por encima de Brandon Davies, que luego lanza el balón sin sentido, y un final de posesión, con una señalización de antideportiva a cuento Jones en un tramo que no debía haber existido con otra gestión del juego) dejaron una sinfonía final dedicadas a los ‘hombres de gris’ y, dosificado por el momento, a los perdedores de la contienda.